domingo, 29 de noviembre de 2009

Aid el Kebir

El Aïd el Kebir (Fiesta Grande) o Aïd el Adha (Fiesta del Sacrificio) es una de las festividades más importantes del Islam.

Conmemora la historia, también recogida en la Biblia, en que el profeta Abraham (Ibrahim) estuvo a punto de sacrificar a su hijo como prueba de amor y sometimiento a Dios (Yahvé/Allah). En el último momento Dios le ordenó canjearlo por un cordero. Esta historia es compartida por judíos, cristianos y musulmanes, la única diferencia es que para los dos primeros el sacrificado iba a ser Isaac, del que desciende el pueblo judío, que por eso se considera elegido por Dios, mientras que para los musulmanes fue Ismael, del que descienden los ismaelitas que a su vez son germen del pueblo árabe y elegido por Dios.
¿Qué fuerte ¿no? Por un lado, la historia es impactante, estar dispuesto a matar a su hijo por Dios... Los teólogos cristianos creo que explican esto relacionándolo con el sacrificio que luego hace Dios de su hijo Jesucristo ¡pero no voy a decirlo muy alto que lo mismo no tiene nada que ver! También me ha impactado ver cómo estas tres culturas, una vez más, compartimos más de lo que pensamos. Porque, seamos religiosos o ateos, nuestra cultura tiene raíces cristianas y el cristianismo raíces judías, y el islam a su vez hereda buena parte de ambos. Me pareció ver que una vez matado el cordero salpicaban con sangre la puerta de la casa, como hacían los judíos durante la Pascua desde las siete plagas de Egipto hasta la destrucción del templo de Jerusalén.
Hay un rito establecido para el sacrificio: se tumba al cordero sobre el costado izquierdo y se le vuelve la cabeza de espalda a La Meca, se murmura una oración, se echan un poco de sal y unas hierbas y... :-/
En España, debido a la legislación sanitaria, esto se hace en lugares habilitados (pabellones, etc.) pero ¡aquí lo hacen en cada casa! Sea en la azotea, sea en el patio común, se van repitiendo las mismas escenas en cada edificio. Cuando el animal ha muerto se hace un corte en una pata y se sopla a pleno pulmón para separar la piel y la carne.
Las costumbres varían un poco en cada país, por ejemplo en Marruecos es costumbre comer el primer día las vísceras (brochetas de hígado, corazón, etc) y el segundo día la carne; en otros países se come todo el primer día. Las cabezas generalmente las sacan a la calle y hacen hogueras donde las asan hasta que se quedan totalmente negas y les quitan los cuernos (dudo mucho que hagan algo más con ellas quedándose tan churruscadas). Las calles, sobre todo por la medina, se van llenando de pilas de pieles, restos de hogueras, cuernos quemados, etc.
Ver la ceremonia no es agradable: se trata de la muerte de un animal que se desangra y que además tarda unos minutos en agonizar y morir. Pero tampoco voy a ser yo quien critique el gesto. En España tenemos la matanza, costumbre muy extendida hace algunas décadas y que hoy en muchos pueblos se está recuperando con la sola finalidad de hacer una parrillada. Y todos los que comemos carne ya podemos imaginarnos qué había antes de cada chuleta...

viernes, 27 de noviembre de 2009

25 de noviembre: Día Internacional de la No Violencia Contra la Mujer

Esta entrada llega con unos días de retraso. Como muchos de vosotros sabréis, el pasado día 25 fue el Día Internacional de la No Violencia Contra la Mujer. Como recuerda Manuel en su blog Curistoria, se eligió este día en conmemoración del asesinato de las hermanas Mirabal en la República Dominicana.

Al parecer el dictador Trujillo, mujeriego empedernido, conoció a las hermanas Mirabal en 1949 en una fiesta a la que fue invitada toda la familia. Quedó encaprichado de una de ellas, Minerva, y a partir de ese momento se sucedieron las invitaciones y los galanteos del dictador, siempre rechazados por la joven. Esto enfureció al dictador, que puso a la familia Mirabal en su punto de mira.

A su vez las hermanas Mirabal comenzaron a participar activamente en el movimiento de oposición al dictador. Fueron encarceladas varias veces y finalmente, la noche del 25 de noviembre en 1960, tres de las hermanas (Minerva, Patria y María Teresa) fueron detenidas y asesinadas a golpes por la policía. Las "Mariposas", como eran conocidas dentro del movimiento antitrujillo, perdieron sus alas en defensa de la libertad, no sólo política sino sobre todo personal.


Al hilo de esto, yo me pregunto ¿qué es violencia contra la mujer? ¿Pegar, maltratar, matar? Pensando en lo que contaba en mi anterior entrada, ¿no atenta también contra la dignidad de una mujer el hecho de decirle cuatro cosas bonitas cuando está delante y engañarla con otra cuando se da la vuelta? ¿el hecho de dar lugar a que tus amigotes comenten entre risas la jugada y luego la saluden tan educados y caballeros? ¿el hecho de que unos desconocidos sepan de si vida íntima mucho más que ella misma?

El otro día les comentaba a mis compañeros lo mismo que puse en el blog: que como compañeros eran un encanto pero como hombres... ¿Sabéis que me contestaron? "Sólo somos hombres". Pero yo he estado pensando y hay otros tipos de hombres. Que saben respetar a una mujer que lo merece. Yo tengo amigos, primos... y NO son así. Cuando tienen novia no van acostándose con otras y tampoco lo intentan. No se intercambian los ligues como si fueran cromos ni nos clasifican entre "sueltecillas" y "estrechas". Claro que prefieren ligar a quedarse a dos velas. Pero tienen unos límites, máxime cuando tienen novia: conceptos como "respeto", "dignidad", "cariño", cuyas definiciones pueden leerse de carrerilla en un diccionario pero no caben en el corazón de algunas personas.


¡Y hasta aquí toda la moralina del mes! Como ya os he dado bastante la chapa con este tema, mañana hablaré de mi vida maroquí. Mañana se celebra el Aid-el-Kebir, la fiesta del cordero. Ya me han contado cuál es el origen de la celebración así que mañana os lo cuento. Dicen que toda la ciudad huele a sangre y carne chamuscada... uggg...


P.D.: Le he tomado prestada a Sand esta canción (¡si es que estoy de un copiota...!)
P.D.2: algún alma caritativa que me enseñe a reducir el tamaño del video, please :o)

lunes, 23 de noviembre de 2009

Hombres


Mi vecino, el que hace un mes me tiraba los tejos con aquel viejo truco de "tengo un par de cervezas en la nevera..." y que hace un par de semanas se beneficiaba a una conocida común, se acaba de traer a la novia (bueno, a la que según declaraciones del menda hechas hace mes y medio no era absolutamente nada) de Barcelona, a pasar unos días. La chica parece simpática, sencilla, agradable y mona. Y salvo que esté de acuerdo con las andanzas de su novio intermitente, lleva una cornamenta que-lo-flipas. Que hay parejas que hablan estas cosas y les parece estupendo y oye, pues mejor para ellos. A mí me saldría un brote de celos que parecería la niña del exorcista pero si a otros les parece bien... El problema es que la gran mayoría de veces estas cosas no se hablan precisamente.
La duda es: ¿Cómo un tío que aparentemente es razonable y sensato (¡nena, tienes un ojo catando a la gente, juas, juas!), con una relación que aparentemente funciona con una chica aparentemente encantadora, se pone a la caza de toda tía que se le pone por delante? ¿De verdad no quiere ni un poquitín a su novia? ¿Ni la considera digna de un poquito de respeto?
Lo malo es que son todos igualicos, al menos los que me han ido a caer alrededor. Como coleguillas muy majetes pero como género masculino... demasiado representativos. Aunque gracias a ellos me ahorraré el divorcio, jaja, ¡de aquí voy a salir solterona convencida!

sábado, 21 de noviembre de 2009

Lilailas

Dícese de aquél(la) a quien todo lo que propongas le parecerá mal. Aquél(la) cuyos gustos son exquisitos en comparación con tus zafiedades. De aquél(la) que ve inconvenientes en todo. Que a todo teme. Que de todo sabe, mientras tú no sabes nada, y aunque él(la) lo sepa poco y mal. Que es abundante en el dinero porque compra la marca más cara por el mero hecho de ser de marca y ser cara, mientras te da a entender que tú por probar productos nuevos (¡que para eso vives en otro país, vaya!) eres avara, mísero y ruin. Que te mira con cara de haba todo el día si es que se digna mirarte. Que no se queda tranquilo(a) si no da dos manos de lejía al suelo y apesta convenientemente toda la casa. Que no quiere comer comida de la señora que nos cocina porque seguro que no ha lavado bien la verdura (espero que así sea y no la haya fumigado con lejía). Que te va poniendo verde con sus compañeros y con tus vecinos porque no haces siempre lo que él(la) manda. Que se te come o te tira tu comida en las narices pero es que siempre se equivoca, aunque la comida esté en tu balda y ella no haya comprado alimento de esa clase previamente. Quien no puede ir a pagar una factura común dos meses consecutivos (pagando por mitades, claro está) si tú no vas a poder ir y te ofreces a ir los dos meses siguientes, porque "las responsabilidades son compartidas" y si no puedes "no es mi problema". Quien, en definitiva, nació lilailas y lilailas morirá pero entretanto te ha ido a caer a ti.
Por algo dicen que es mejor vivir sólo...

miércoles, 18 de noviembre de 2009

18 noviembre: fiesta nacional

El 18 de noviembre se celebra en Marruecos la fiesta nacional. Si hace unos días, el 6 de noviembre, se conmemoraba la Marcha Verde, hoy se conmemora la declaración de independencia del país en 1955.
Mediante el Tratado de Fez de 1912, Marruecos se convirtió en protectorado francés (y subprotectorado español en las regiones del Estrecho, Ifni y Sáhara Español).

Comienza una época de gran inestabilidad, en la que el protectorado se convierte en un escenario más de la I Guerra Mundial y se suceden las revueltas instigadas por los alemanes y alimentadas por el espíritu nacionalista de la población. Estas revueltas se extienden también al protectorado español y en 1921 la rebelión de Abd-el-Krim se salda con 18.000 soldados españoles muertos en Annual y cinco años de guerra en la zona del Rif. En 1943 se funda el primer partido nacionalista, Istiqal (independencia). En 1953 unas revueltas populares en Casablanca son duramente reprimidas por el gobierno francés, que depone al sultán Mohammed Ben Youssef (Mohammed V), que parte al exilio a Madagascar. No obstante, el 16 de noviembre de 1955 el sultán vuelve a Marruecos con el beneplácito de Francia y el 18 de noviembre, aniversario de su entronización en 1927, dirige la oración del viernes en las ruinas de la mezquita Hassan, en Rabat, y declara la independencia de Marruecos. Tanto España como Francia reconocen esa declaración de independencia y en 1956 Marruecos es admitido como miembro de la ONU.

De modo que Marruecos es un país joven (apenas 54 años) con una historia de siglos detrás. Pero eso da para escribir muchos posts...

sábado, 14 de noviembre de 2009

¡Otro premio!

Mi amiga S. me ha concedido un gran premio:
Es el "Premio a la Honestidad" y para recogerlo tengo que contar diez verdades sobre mí misma. Pero siguiendo su ejemplo y como los diez mandamientos se resumen en uno :-P voy a contar sólo una verdad: soy ingenua y tonta hasta morirme.
Y el premio se lo concedo a...:
Por su honestidad en sus respectivos blogs y por ser como son.
Y con esto y un bizcocho...

El burro y el pozo

Hoy me han mandado uno de esos forward que merece la pena leer:
Un día, el burro de un campesino se cayó en un pozo. El animal lloró fuertemente durante horas, mientras el campesino trataba de buscar algo que hacer. Al final, el campesino pensó que el burro ya estaba viejo y el pozo ya estaba seco y necesitaba ser tapado de todas formas. Realmente no valía la pena sacar al burro del pozo.
Invitó a todos sus vecinos para que vinieran a ayudarle. Cada uno agarró una pala y empezaron a tirar tierra al pozo. El burro se dio cuenta de lo que estaba pasando y comenzó a llorar amargamente. Luego, para sorpresa de todos, se calló después de unas cuantas paletadas de tierra. El campesino miró al fondo del pozo y se sorprendió de lo que vio. Con cada paletada de tierra, el burro estaba haciendo algo asombroso: se sacudía la tierra y pisaba encima de ella. Muy pronto todo el mundo vio sorprendido cómo el burro llegó hasta la boca del pozo, pasó por encima del borde y salió trotando...

MORALEJA: La vida va a tirarte tierra, todo tipo de tierra... el truco para salir del pozo es sacudírtela y usarla para dar un paso hacia arriba. Cada uno de nuestros problemas es un escalón hacia arriba. Podemos salir de los más profundos pozos si no nos damos por vencidos... Usa la tierra que te echan para salir adelante.

Recuerda las 5 reglas para ser feliz:
1. Libera tu corazón de odio.
2. Libera tu mente de preocupaciones.
3. Simplifica tu vida.
4. Da más y espera menos.
5. Ama más y... sacúdete la tierra porque en esta vida hay que ser solución, no problema.

viernes, 13 de noviembre de 2009

Convivir

Dicen que convivir es un arte, que requiere diplomacia, tacto y hasta un poquito de astucia para no dejarse manejar. Convivir es respetar al otro, saber perder y saber ganar manteniendo siempre las formas... Qué simple y qué complicado a la vez.
Soy partidaria de comprar la comida por separado, en común los productos básicos (aceite, vinagre, leche, azúcar, etc.) pero para el resto de alimentos, si los gustos son distintos, prefiero comprar yo mi comida y que las demás personas se compren la suya. Así se evitan los "pfff, ¿eso vas a comprar? Mejor esto otro" o pagar a medias comida que ni me gusta ni voy a probar. Ni yo tengo que pagar caprichos de otro ni otro tiene que pagar los míos. Máxime si luego no me voy a coger o no les voy a ver el pelo.
Comprando la comida por separado, entiendo que lo lógico es que cada uno coja de lo suyo salvo que excepcionalmente se quede sin comida o le apetezca algo especial que ha comprado la otra persona. Pero mejor comentarlo ¿no? Algo así como... "oye, te he cogido esto, no sé si te importa" o "qué bueno estaba esto, te he cogido un poco". Es una forma de reconocer al otro y de respetar su espacio.
Con mis anteriores compañeras de piso esto quedó absolutamente claro desde el principio de la convivencia y no porque yo lo impusiera. Al contrario, era la primera vez que compartía piso e iba convencida de cocinar por turnos y comer a medias. Pero las dos prefirieron ir por libre, cada una se cogió sus armarios y sus baldas en el frigorífico y ni siquiera nos tocamos la comida en todo el tiempo que estuvimos juntas.
Ahora la situación es distinta. Supongo que mi compañera estaba acostumbrada a compartir comida pero tenemos gustos tan distintos que esto iba a suponer un trastorno (para empezar, llevo un mes y medio sin probar el pescado: ¡dieta fresca y variada!). Por eso le comenté que prefería comprar por separado y no le sentó inicialmente muy bien... Ahora compramos así pero de vez en cuando noto invadido mi espacio. Piezas de fruta, queso, etc. Ya digo que no me importa compartir pero con la premisa de "coge como si fuera tuyo pero no olvides que es mío". Si no tienes, si necesitas, si te apetecía... y comentándolo.
Lo que no tolero es que me tiren la comida. Hoy al ir a cenar he visto fruta mía en la basura. Y me ha sentado como un tiro. Si está muy madura o está partida y se ha puesto fea, dímelo y seré yo quien la tire o quien decida si la considero o no en mal estado. Pero que me la tiren no lo tolero. Es mía y soy yo quien decide. Detesto tirar comida, máxime cuando hay gente pasándolas canutas y enfermando por escasez de alimentos. Tanto en España como aquí hay gente revolviendo en la basura pero tampoco es cuestión de que se coman "mi basura", para eso voy y compro un kilo de fruta y se la doy en la mano y mirándolos a los ojos, no les tiro un puñado de basura para que la rebañen.
Vale, que puede ser un despiste, seguro que sí. Pero hay que ver, nunca se equivoca pensando que algo de lo suyo es mío. ¡Los seres humanos somos despistados pero no tontos, nunca somos nosotros mismos los que salimos perdiendo!
Pues nada, me he mordido la lengua y he hecho una queja delicada y tímidamente, como acabo haciéndolas casi siempre -si tuviera más caracter, más me respetaría la gente...-. Cierto es que a veces me cabreo y me sale la vena brusca pero son las menos y para lo que me sirve...
¿Qué os parece, soy demasiado rara? ¿Vosotros compartís o no compartís? Yo sólo busco mi espacio, que se respete mi comida y mi propia persona...

martes, 10 de noviembre de 2009

El Patito Feo

Tierra adentro, en la parte baja de la pradera, escondido entre los altos juncos que crecían en el borde de la laguna, había un nido lleno de huevos. Mamá Pata estaba suavemente sentada sobre ellos, para darles calor. Esperaba con paciencia el nacimiento de sus patitos.
¡Crac! ¡Crac! Uno tras otro comenzaron a abrirse los huevos, y los patitos asomaban por ellos sus cabecitas. Pero... ¿qué será esa horrible ave gris que aparecía? Mamá Pata no salía de su asombro. "¡Ninguno de los otros patitos es como este!", exclamó.
Algunos días después, Mamá Pata fue caminando hasta la laguna seguida de sus patitos. ¡Plafff! Se lanzó al agua... y uno tras otro saltaron los patitos. Flotaban espléndidamente. Y hasta el patito feo nadó junto a ellos.
Pero después fueron al corral de los patos. Los otros patos los miraron con impertinencia y dijeron: "Miren, aquí viene otra cría, ¡como si ya no fuéramos bastantes! ¡Y qué feo es ese patito! ¡Sáquenlo de este corral! ¡No lo queremos!".
Uno por uno, los patos se lanzaron sobre el patito feo y lo picotearon en el cuello, y lo empujaron de un lado a otro. Vinieron después algunos pollitos y ellos también picotearon al pobrecito.
Mamá Pata trató de proteger al patito feo. "Déjenlo tranquilo", pidió a las malignas aves, "él no hace daño a nadie". Pero de nada sirvió. Y hasta sus propios hermanitos empezaron a tratarlo mal.
Todos los días era lo mismo. El patito feo no podía escapar al maltrato. "Creo que será mejor que me vaya lejos, muy lejos", se dijo por fin. Así es que, saltando el cerco, salió a viajar tan rápido como pudo.
Llegó el otoño. Las hojas se pusieron amarillentas y rojizas en el bosque. Una tarde, a la puesta del sol, aparecieron unos cisnes por entre los arbustos. "¡Ah! ¡Qué lindo ser tan hermoso como ellos!", suspiró el patito feo.
Vino después el invierno. Los días eran cada vez más fríos y el pobre patito feo tuvo que nadar en el agua helada que empezaba a congelarse a su alrededor. Nadie le traía alimentos y apenas tenía qué comer. Todo era muy triste...
En la primavera, cuando el sol volvió a calentar la tierra y las plantas a florecer, el patito feo notó que sus alas se habían agrandado y eran muy fuertes. Las batió contra su cuerpo, una y dos veces, hasta que por fin se elevó en el aire.
No pasó mucho tiempo antes de que se encontrara en un gran jardín. Tres hermosos cisnes nadaban en un estanque. "Me gustaría ir con ellos", se dijo el patito. Quizá ni siquiera me hagan caso, por ser tan feo. Pero, sin embargo, no importa, lo intentaré".
Voló hasta el agua y nadó rápidamente hacia ellos. Pero cuando miró hacia abajo y vio su propio reflejo en el agua clara, ¡qué sorpresa! Ya no era un ave oscura y fea, como le había parecido siempre. Él también era ahora un hermoso cisne blanco.
Unos niños entraron al jardín, gritando: ¡Un cisne nuevo! ¡Mírenlo, aquí!" Y después añadieron: "¡Es el más lindo de todos los cisnes!".
El cisne nuevo volvió tímidamente la cabeza. Pero se sentía feliz. Aleteó, curvó el grácil cuello y dijo: "Jamás soñé con tanta dicha cuando era el patito feo".

P.D.: Dicen que así acaba el cuento, que todo patito feo acaba encontrando su bandada de patos con los que nadar contracorriente.

P.D.2: El texto lo tomé prestado de... aquí.

domingo, 8 de noviembre de 2009

Lo que da de sí una "fragoneta"...

Prometí contaros mis aventuras ratoniles por Marruecos. Cuando llegué no tenía piso y dediqué los primeros días a recorrer calles y agencias en busca de un lugar donde meterme en los próximos meses. Después de mucho buscar y de movilizar a otros españoles que nos ayudaron en la búsqueda... encontré piso justo al lado de donde estaba viviendo (en casa de un compañero que amablemente me acogió los primeros días). Un piso estupendo, amplio, luminoso, relativamente nuevo para lo que estábamos viendo. Genial. Sólo que... ¡estaba vacío!
Aquí es difícil encontrar pisos amueblados y los que se encuentran tienen dos características: una, están amueblados al estilo marroquí (o sea, unas telas, rasos y terciopelos coloridos-y-suntuosos-que-lo-flipas) y dos, son megacaros (o sea, precio-especial-amigo-extranjero). Así que la mayoría de los expatriados se cogen pisos vacíos y los amueblan o heredan pisos previamente amueblados por otros expatriados y les pagan el traspaso de los muebles.
Yo opté por la primera solución (bueno, he de confesar que fue amor a primera vista, cuando lo ví pensé... ¡este piso tiene que ser mío!, y me dio igual que tuviera muebles, ya nos habían dicho dónde comprarlos por poco dinero).
Así que luego hubo que hacer excursión para comprar muebles. Aquí no existe ese maravilloso ingenio sueco conocido como Ikea, a lo más hay una tienda de muebles llamada Kitea pero en lo único que se parece es en el nombre porque no tiene nada que ver ni en tamaño, ni en variedad de productos, ni en precio. Nos contaron que había un mercadillo con fabricantes de muebles en el barrio de Akkari donde se podían comprar tarbas (es algo así como un pallet gigante con un colchón encima que sirve de cama, de sofá o de lo que lo quieras utilizar: por ejemplo los "salons marocains" suelen tener un mínimo de tres en forma de U) y otros muebles. Así que allí nos fuimos. Contactamos con una minifurgoneta (bueno, más bien con su conductor) tan mini tan mini tan mini que sólo había plaza para el conductor y para un acompañante de tipín fino y buena figura. La parte de atrás estaba descubierta y cerrada en los laterales con unas tablas; ahí es donde irían los muebles. Bueno, pues en ese asiento del conductor nos metimos mi compañera de piso y yo una mañana de domingo emulando las figuras del tetris y muriéndonos de la risa cada vez que pasábamos por un puesto de policía.
En el mercado compramos muebles para las dos habitaciones y para el salón, en total dos camas grandes con sus colchones, 3 tarbas con sus colchones y una mesa de comedor con 6 sillas. Cargamos todo en la furgonetilla y nos volvimos con la certeza de que nos íbamos a quedar tiradas por el camino, ¡la pobre furgoneta casi no avanzaba de tanto peso que llevaba! Pero llegamos sin problemas y ya tenemos la casa un poco amueblada.
Aquí os dejo una foto de la "fragoneta". Os puedo asegurar que fue una experiencia memorable...


P.D.: ¡Dejad comentarios, que veo que tengo visitas de muchos sitios pero no me dejáis comentarios! Please... :-)

lunes, 2 de noviembre de 2009

¡Fiestaaaaaaa!

Y no lo digo por la fiesta de Halloween de este fin de semana, que la hubo con juerga, calabaza, monstruos y brujas, guitarra, Elvis y Sabina hasta las cuatro de la mañana, con cabreo de los vecinos e intervención de "los grises".

Lo digo porque al día siguiente se me ocurrió ir a la catedral católica a la misa de Todos los Santos. Llevo un tiempo en horas bajas divinas, yo que siempre había sido tan rezadora y tan confiada en la providencia de Dios. La cuestión es que pese a ello, tenía curiosidad por ver una misa en otro idioma y por ver cómo se vive la fe católica en un país musulmán.

Pues bien... la misa duró ¡una hora y media! Era un megamix de francés, portugués, español, inglés, etc., supongo que para que nadie perdiera el hilo viniera de donde viniera. Pero lo que más me llamó la atención fue que ¡la misa era una fiesta! Los cantos eran tan animados (o más) que los de la noche anterior, ¡tenía que hacer esfuerzos para no ponerme a bailar allí mismito!

Iba a poner un vídeo de la marcheta pero pesa mucho.

Había muchos ritmos africanos, porque muchos de los asistentes eran de raza negra, alguno en francés, y hasta alguna canción en un español que no se entendía casi nada. Pero ¡vaya marcha! Nada que ver con la seriedad y el aburrimiento, digoooo recogimiento, que se respira casi siempre en España. Lo mismo los obispos españoles se echaban las manos a la cabeza, que ellos son más partidarios de volver al latín. Pero a mí qué queréis que os diga, que me ha gustado. A la gente se la veía feliz, sonriente, simpática. Nada que ver.